resumen deportivo de las ultimas semanas
Como esto está resultando más difícil de lo que creí, tomo el camino fácil.
La semana pasada comenzó un torneo de ¿futbolito? en la facultad y, para sorpresa de muchos, nada menos que doce equipos se inscribieron. Pues quién se habría imaginado que armabas doce equipos de más menos diez hombres en una facultad de ochocientas personas (en que los géneros andan parejos, si mal no recuerdo) y que se "dedican" a las humanidades. Que entre los cabezones estudiantes de filosofía, lengua y literatura e historia hubieran tanto practicantes del deporte (ya a secas). Bueno, súmeme a mí, y a mis nueve compañeros (u ocho, o siete versaba esa vieja canción de fogón?).
La semana pasada debutamos, y nos comimos once. Al quinto, mostramos algo que pareció ser un repunte, con un gol, pero desmentido rapidamente por otro y otro y otro y otro y otro y otro más. 11-1. Profundo desazón en mis camaradas. Muy al contrario, nuestros próximos rivales se reían del partido que se les venía, a ver si ahora se afirmaban, que venía el partido ideal para cimentar la clasificación a la final, etc. Nos miraron en menos...
El jueves, sólo nos comimos uno. (y se lo comió el arquero... jeje) pero después de tres, y lo que también parecio un repunte fue ahogado con dos más. 5-1. Pitazo final, y ahora sí, sonrisas, no burlonas como las de la semana pasada, sino de satisfacción, de confianza en que se puede, que la clasifición está ahí.
Además, y para completar una semana de satisfacción deportiva (ojalá) mañana competición natatoria. Excelente pronóstico según el entrenador, mas como esto es una competencia con uno mismo y su tiempo (y para que mierda entregan medallas, podios, etc?) con bajar las marcas está bien, al menos esa confianza me tengo.
"You're like an angel/ and you give me your love/ and I just can't seem to get enough"
La semana pasada comenzó un torneo de ¿futbolito? en la facultad y, para sorpresa de muchos, nada menos que doce equipos se inscribieron. Pues quién se habría imaginado que armabas doce equipos de más menos diez hombres en una facultad de ochocientas personas (en que los géneros andan parejos, si mal no recuerdo) y que se "dedican" a las humanidades. Que entre los cabezones estudiantes de filosofía, lengua y literatura e historia hubieran tanto practicantes del deporte (ya a secas). Bueno, súmeme a mí, y a mis nueve compañeros (u ocho, o siete versaba esa vieja canción de fogón?).
La semana pasada debutamos, y nos comimos once. Al quinto, mostramos algo que pareció ser un repunte, con un gol, pero desmentido rapidamente por otro y otro y otro y otro y otro y otro más. 11-1. Profundo desazón en mis camaradas. Muy al contrario, nuestros próximos rivales se reían del partido que se les venía, a ver si ahora se afirmaban, que venía el partido ideal para cimentar la clasificación a la final, etc. Nos miraron en menos...
El jueves, sólo nos comimos uno. (y se lo comió el arquero... jeje) pero después de tres, y lo que también parecio un repunte fue ahogado con dos más. 5-1. Pitazo final, y ahora sí, sonrisas, no burlonas como las de la semana pasada, sino de satisfacción, de confianza en que se puede, que la clasifición está ahí.
Además, y para completar una semana de satisfacción deportiva (ojalá) mañana competición natatoria. Excelente pronóstico según el entrenador, mas como esto es una competencia con uno mismo y su tiempo (y para que mierda entregan medallas, podios, etc?) con bajar las marcas está bien, al menos esa confianza me tengo.
"You're like an angel/ and you give me your love/ and I just can't seem to get enough"
1:57 a. m.
Jugué con mis compañeros. Nos golearon. 6 o 7 a 1. Paliza. No me sentía así de humillado desde el colegio, qué chucha. Casi me muero. Como era calama, me la saco por apunamiento. top